365 Besos Contra La Homofobia

Amnistía Internacional, la organización defensora de los derechos humanos, lanzó, desde su filial en Hungría la campaña  “Kiss Against Homophobia” (Beso contra la Homofobia), con el objetivo de recoger al menos 365 besos, uno para cada día del año, para el próximo 11 de octubre, fecha en que se celebra en todo el mundo el “International Coming Out Day” o Día Internacional para salir del armario.

Cualquier persona puede participar, es tan sencillo como subir a la citada web una foto tuya de perfil con los labios fruncidos a modo de beso. Después la organización se encargará de colocar tu foto junto a otra  foto en la que aparezca una persona de tu mismo género, consiguiendo el

efecto de un beso.

La iniciativa, que se puso en marcha hace un par de meses y cuenta ya con 429 besos, pretende demostrar que el amor es un derecho fundamental que no entiende  de géneros.

Un beso entre dos personas es la forma más íntima de contacto que simboliza a la perfección el compromiso entre ellas.

¡Bésate contra la homofobia!

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Los niños soldados de Sudán del Sur

Ya lo venía diciendo Lucila Rodriguez-Alarcon desde Intermón Oxfam en el Blog 3500 millones: Ideas irreverentes para acabar con la pobreza, y del que es habitual autora: Sudán del Sur será noticia.
Y esto fue en el mes de abril.
Pero siendo honestos y mirando hacia atrás, Sudán del Sur nunca ha dejado de ser noticia.
El país más joven del mundo nació hace tres años y desde diciembre de 2013 está sumido en un cruento conflicto que no mejora y ha desplazado de sus casas a 1,5 millones de personas, según datos de Unicef, y donde el hambre amenaza con llevarse la vida de 50.000 menores de cinco años.
Pero el hambre no es la única amenaza que pende sobre ellos. De acuerdo con las últimas investigaciones de la organización Human Rights Watch (HRW), el Ejército de Sudán del Sur ha empleado niños soldado en los recientes enfrentamientos en Benitu y Rubkona contra las fuerzas de la oposición violando así las normas de Derecho Internacional.

Kulang vive desde el pasado diciembre en un campo de refugiados, después de que su casa fuera atacada. / ANDREEA CAMPEANU (OXFAM INTERMÓN)

Kulang vive desde el pasado diciembre en un campo de refugiados, después de que su casa fuera atacada. / ANDREEA CAMPEANU (OXFAM INTERMÓN)

El reclutamiento de niños con fines militares es, desgraciadamente, una práctica habitual en estos conflictos.

Muchos de ellos son raptados, amenazados y educados para combatir con un fusil contra su propio pueblo.
Mientras, las niñas son violadas y utilizadas como objeto sexual entre los adultos. Además de la brutalidad y el trauma que sufren, estas agresiones sexuales pueden producirles lesiones físicas graves y embarazos forzados, así como contagio de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual…

Este fue el caso de Emmanuel Jal, cantante de hip-hop, nacido en 1980 en Tonj, actual Sudán del Sur. Su autobiografía está recogida en el documental War Child.

Tras años como niño soldado consiguió escapar y conoció a una cooperante británica en el campamento de Waat, al este de Sudán, Emma Mccune. Fue ella la que marcó un punto de inflexión en su vida y a partir de ese momento comenzó a contar su historia, su pesadilla.

La triste historia de miles de niños y niñas.